domingo, 30 de diciembre de 2012

Baumgartner y la barrera del sonido

Posiblemente el mejor proyecto de marketing jamás realizado por una empresa esconde una hazaña de valentía y heroísmo. Una hazaña de enfrentarse a lo desconocido sabiendo las consecuencias de un error. Nos referimos al salto de Felix Baumgartner desde la estratosfera patrocinado por Red Bull. Baumgartner, nacido en Salzburgo en 1969 es un ex-militar metido a paracaidista profesional y saltador base.

Con Red Bull patrocinandole desde hace 10 años ha realizado saltos tan peculiares como lanzarse desde las torres Petronas de Kuala Lumpur. Hace dos años se le propone una locura. Un salto desde 39.000 metros de altura. El austriaco aceptó sabiendo que entraría en la historia si lo conseguía. Comenzaron dos años de entrenamiento y estudios patrocinados por la marca de bebida energética Red Bull. El programa bautizado como Red Bull Stratos tuvo que superar problemas legales pero en 2012 entró en su fase final.

El 15 de marzo el austriaco sube en globo en el primer salto experimental del proyecto hasta los 21.817 metros y se lanza. Pruebas en el traje que Baumgartner necesita para no congelarse en su caída y soportar los cambios de presión. Pruebas en la cápsula y el globo que le deben subir hasta la estratosfera para realizar la hazaña. En este primer salto el austriaco está 3:43 minutos en caída libre en un salto que duró 8:08 minutos. En el segundo salto de prueba Felix subió hasta los 29.000 metros de altura para lanzarse durante 3:48 minutos de caída libre.

Tras estas dos pruebas, todo esta preparado para que el miércoles 10 de octubre el austriaco saltase desde los 39.000 metros de altura. Con el saltador en la cápsula el salto se debe cancelar debido al fuerte viento que corre en Nuevo México, lugar en el que se realizará el salto. El salto se pospone al día 12, jornada en la que tampoco la meteorología permite el salto. Es finalmente el domingo 14 de octubre cuando el tiempo permite el salto.

Durante una hora y media, Felix Baumgartner sube en globo hasta alcanzar los 39.068 metros de altura y rompe el primer récord; vuelo tripulado en globo a mas altura jamás realizado. Al llegar a este punto la cápsula se abre. Felix Baumgartner se asoma al mundo. Las cámaras de Red Bull recogen el momento en el que el saltador austriaco mira al mundo y todo el mundo le mira a él. Entonces, el salto...



El paracaidista se convierte en un pequeño punto desde las cámaras de tierra, el salto comienza bien pero pronto el saltador entra en barrena y comienza a girar. El mundo entero contiene la respiración pero Baumgartner consigue controlar el salto. Se estabilizó para alcanzar los 1.342 kilómetros por hora. Segundo récord roto; primer ser humano en romper la barrera del sonido sin ayuda mecánica. Tras unos 4 minutos de caída libre Felix abrió su paracaídas de modo manual, lo cual hacía ver que estaba consciente. Su traje llevaba mecanismos especiales que en caso de pérdida de consciencia habrían abierto los paracaídas.

Felix planeó los cielos de Nuevo México durante otros 5 minutos para aterrizar perfectamente y batir otro récord; el salto mas grande jamás realizado, 39.008 metros de caída. Red Bull nos tuvo pendientes durante una semana de algo que llevaba su logo, pero si bien es cierto que la hazaña de este austriaco es sobrenatural.



Demuestra una vez más la curiosidad del ser humano por conocer sus límites y por intentar superar lo que parece imposible. Una hazaña que al mas puro estilo de los astronautas de los 60 concentró la atención del mundo en un hombre, un momento, un salto. Una hazaña que merece estar entre los mejores momentos del 2012.

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